Sant’Antioco es la cuarta isla más grande de Italia y la ciudad más antigua de Italia. Hoy mira al futuro como isla sostenible con sus rutas de senderismo y ciclismo, las actividades deportivas y de excursión relacionadas con el mar y el viento. Entre arena y rocas, sus playas satisfacen todos los gustos. Del mar se origina el bisso, la seda del mar, y también el atún, pescado y comercializado en todo el mundo. De los terrenos costeros impregnados de sal nace el vino Carignano, hecho único por viñedos centenarios.
Torre Canai
Un lugar de paz inmerso en la naturaleza, antigua centinela a defensa de la isla. Desde su terraza la vista se pierde hacia panoramas infinitos, auténtica maravilla para los ojos y para el alma.
Spiaggia di Coequaddus
Arena oscura de origen volcánico y aguas poco profundas que se desvanecen en mil tonos de azul, es la playa más querida por las familias de la isla.
Faro di Mangiabarche
El faro más fotografiado de la isla se alza sobre una roca en medio del mar, vigila desde hace siglos los peligrosos bajíos y resiste las más poderosas marejadas.
País de Sant’Antioco
Ciudad más antigua de Italia, alberga sitios arqueológicos extraordinarios que representan una de las sorpresas más fascinantes de la isla.
Portixeddu
Un refugio natural, perfecto para quienes desean vivir la libertad del mar, inmersos en su esencia más pura y salvaje.